Ella misma, su peor enemiga...

Se encuentra frente a una computadora, hojas a su alrededor, un papel de caramelo que se comió ayer y ganas de escribir… Todo tan desordenado. “Mi orden no es tu orden” ,“Mi desorden es mi orden”, “En mi desorden encuentro las cosas” se la escucha decir. Pero… ¿Qué pasa si en verdad no encuentra lo que busca? ¿Qué pasa si ese desorden que tiene frente a ella, es el mismo que tiene por dentro? ¿Qué pasa si lo que siente y lo que piensa no concuerdan? ¿Qué pasa si lo que hace o dice no es lo que piensa y mucho menos lo que siente? 

A veces se siente así… Parece tenerlo todo pero siente que le falta mucho… Parece que mejor no podría estar, cuando no siente que sea así… Parece que tiene millones de oportunidades cuando lo único que siente es que las oportunidades se alejan de ella… No hace nada para encontrar esa otra oportunidad, la que ansía, la que espera… No tiene ganas de hacer lo que tiene que hacer, tiene ganas de hacer lo que no tiene que hacer… La pregunta para eso sería ¿Quién le dice lo que tiene o no que hacer? La respuesta es obvia. ¡ELLA MISMA! Su peor enemiga.

Piensa y le da mil vueltas al asunto… ¿Será la que quiere ser? ¿Será como quiere ser? ¿Será la que ven que es o, será como ella se ve?

Con un mambo en la cabeza que no es para bailar…