Juliana, Lorenzo, Benja y el sol...

Pasa la gente, el colectivo rojo y el semáforo empieza su cuenta regresiva...
Personas por todos lados, que vienen, que van, que pasan, pasean, corren, caminan. Se enojan, se ríen, sonríen, hablan, discuten y algunos se animan a cantar. Cada uno con su historia, cada uno en su mundo... Es que vivimos en el mismo lugar pero a veces estamos en lugares muy distintos. Historias que se cruzan sin querer, miradas, sonrisas compartidas y el mismo calor... El sol está en todos los mundos hoy, eso me demuestran las caras, los gestos, los anteojos caminantes...
Los miro de afuera y pensar que estoy adentro, y como yo observo, otros me observan. ¿Y si podrían ver lo que estoy pensando y escribiendo? Sabrían que escribo sobre ellos. Pero no pueden, no saben... Yo tampoco se lo que piensan, sólo puedo jugar a adivinar si tengo ganas...
Es que no podemos saber qué piensa el otro, pero por suerte algunos dejan que con sólo mirarlos nos demos cuenta de su luz... ¡Mirala a la Juliana, Lorenzo y Benja!

Gracias por mostrarme su luz! Gracias por dejarme jugar con ustedes!