Y estás con esas ganas constantes de ponerte a prueba… De accionar, de no quedarte sentada esperando a ver qué pasa, de no quedarte con las ganas de mandar el email. No tenés ganas de escucharte decir nunca más “si hubiera ido, hubiese pasado tal cosa…” Preferís decir “Fui, lo intenté” Muchas veces no te sentís preparada, otras sí… Y sentís que te falta mucho pero tenés ganas de probar igual con lo que tenés, con lo que sos, con las ganas, con el deseo… Y todo el tiempo vas atravesando distintos desafíos y no es que sos “superwoman” , como algunos creen… También llorás, te da miedo, sentís que se te revuelve el estómago, te ponés nerviosa y lo peor hasta a veces te quedás sin voz, tal vez tenés muchas cosas para decir, para gritar y no te animás… Antes de “probar” te ponés bastante histérica, aunque claro eso casi nadie lo ve… ¡Es que es tanto lo que uno se juega! Lo ves de afuera y te aseguro que no lo entendés. Esa mezcla rara de tener ganas, entusiasmo pero a la vez te...